En el día a día de la consulta veterinaria, cada vez es más común incluir pruebas ecográficas dentro de los protocolos diagnósticos.
Este aumento de popularidad se debe a que es una técnica sencilla, no invasiva y que se puede realizar con el animal despierto ya que en pocas ocasiones
se requiere de la sedación del animal para realizarla.
Además para cierto tipos de estudios, comparada con otras técnicas de diagnóstico por imagen como la resonancia magnética o el TAC (tomografía axial computerizada) nos proporciona más información, en menos tiempo y con un coste más reducido.
Comparada con otra técnica común en la clínica de pequeños animales como los rayos X que nos dan una imagen en dos dimensiones estática, la ecografía nos permite valorar imágenes en movimiento (peristaltismo intestinal, cálculos en la vejiga, movimiento de las cámaras cardíacas, vesículas de gestación, vasos sanguíneos...)
También nos permite ver la estructura interna de los órganos, diferenciar entre distintas densidades en los tejidos que los forman para poder descubrir posibles
alteraciones patológicas.
La ecografía de abdomen está indicada siempre que exista dolor abdominal, ante la sospecha de cuerpo extraño gástrico o intestinal que no visualicemos en radiografía
simple, para localizar testículos no descendidos (criptorquidia) y, en general, siempre que deseemos evaluar la arquitectura interna de cualquiera de los órganos situados en dicha región.
Mediante ecografía también podemos realizar punción ecoguiada para la obtención de muestras para estudios citológicos o microbiológicos,tanto de muestras líquidas (orina, bilis, efusión pleural o pericárdica, efusión peritoneal, quistes o abscesos), como de vísceras o lesiones sólidas (nódulos linfáticos, bazo, hígado, próstata).
Los nuevos equipos como el que tenemos en nuestras instalaciones, actualmente vienen equipados con Doppler que nos ayuda en el estudio de los vasos abdominales, tanto arteriales como venosos y diagnosticar trombos, placas arterioescleróticas, estenosis, anomalías congénitas, etc. (En la imagen que acompaña al artículo podéis ver una ecografía con Doppler de un vaso sanguíneo)
No podemos olvidarnos tampoco de la aplicación por excelencia de los ultrasonidos. El diagnóstico de gestación. Gracias a la ecografía podemos valorar si la hembra está gestante, lo avanzada que esté la gestación, detectar si hay sufrimiento fetal, o si por el contrario los fetos se encuentran en perfectas condiciones para el parto.
En Quevedog, en el barrio de Chamberí, contamos con un ecógrafo de última generación con el que podremos realizar un diagnóstico rápido y certero de las posibles patologías de vuestra familia animal, tanto en la consulta ordinaria, como en nuestro servicio de urgencias.
Si necesitas hacerle una ecografía a tu peludo no dudes en ponerte en contacto con nosotros.